Reflexión: ¿siempre viajas solo?

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Reflexión: ¿siempre viajas solo?

¿Te gusta viajar solo o acompañado? ¿Te gusta alternar entre viajar solo y acompañado? Si eres de los que viajan sola o solo como yo, seguramente te habrás cansado de escuchar esta pregunta ¿Siempre viajas solo? Por supuesto que cuando viajas de esta manera, y sobre todo en bicicleta, tras esta pregunta vienen muchas más, pero hoy te hablaré de mi reflexión sobre ésta pregunta concreta.

Preguntas a viajeros de vida nómada

Una de las preguntas más frecuentes que algunas personas me hacen durante el viaje es esta: ¿Siempre viajas solo?. Que seguramente coincide también con el cuestionario ciclo-viajero de muchos otros que viajan solos como yo. No importa el país donde me encuentre, esta pregunta siempre está presente. Solo cambia el orden de la pregunta en la lista del cuestionario.

Según mi experiencia de viaje, habiendo salido de España dirección Este, fue a partir de los Balcanes cuando esta pregunta empezaba a situarse en las primeras posiciones. Tras responder afirmativamente, a ésta suelen venir ligadas dos preguntas más, como por ejemplo: “¿la familia?” o “¿no tienes miedo de que te pase algo?”.

La pregunta más divertida y de nueva adquisición fue en Turquía cuando un chaval adolescente, al verme solo, me preguntó seguido: ¿no tienes amigos? No veas lo que me reí con aquel chiquillo que junto a sus colegas habían hecho pellas ese día en el colegio. Tengo muchos amigos, le dije, pero no todos viajan en bicicleta.

Reflexiones personales sobre el cuestionario ciclo-viajero

Normalmente las personas preguntan en relación a sus miedos o a lo que ellos consideran importante y para este chaval los amigos eran lo primero. Y es cierto, que de los Balcanes hacia el Este la familia era una de las cuestiones principales por el valor y el peso que tiene en la sociedad debido seguramente a las dificultades para ganarse la vida. Para ellos es difícil entender cómo una persona puede vivir en solitario y sin un hogar o familia que le arrope.

Es obvio que físicamente viajo solo encima de la bicicleta, pero lo digo de corazón, nunca me he sentido solo. Es imposible. Cómo es posible sentirse solo cuando estás rodeado de naturaleza, de montañas, ríos, bosques, el sol, la luna… o el viento que te acompaña, aunque sea para hacerte ir más lento. Recuerdo que la gran ciclo-viajera Heike Pushbikegirl decía en una entrevista que ella se sentía mucho más sola en una ciudad que viajando en plena naturaleza. Y la entiendo. En la ciudad hay demasiado ruido. No sólo ambiental sino mental. Y para disfrutar de la soledad es necesario el silencio. Y cuando estás en pleno silencio y escuchas tu yo interior, es cuando te das cuenta de que no estás solo.

La Energía Universal que nos envuelve

Y luego existe lo que en el mundo tiene tantos nombres: Dios, Universo, Divinidad, Energía Global o Divina. Yo suelo llamarle cariñosamente Mister, como si fuera mi entrenador, mi maestro, mi aliado, mi guía…y éste no falla nunca.

Hace poco participé en el primer “festival de ciclo-turismo en casa” que organizó Laura Rincón de @dosruedasdospedales, y creo que fue Ana @remoteana que preguntó, qué cosas de mi experiencia de viaje no me había esperado. Y sin duda alguna, una de esas cosas es el cariño recibido de tanta gente. Y no sé por qué, me emocioné como un niño, al responder.

Tuve que hacer una breve pausa, pues de repente pasaron por mi mente tantas personas y tantos momentos, que por eso, cada vez que surge la pregunta, ¿Siempre viajas solo?, me río y respondo con total seguridad y para sorpresa del receptor: “No,  I never walk alone” (Nunca viajo solo).

Gracias por leerme.
Desde 2019, Rodando el Mundo en Bicicleta
Raúl, biciruling.

Raul ALzola
hola@biciruling.com
1 Comment
  • Carles Rojo Jr.
    Posted at 21:08h, 17 marzo Responder

    Muy buena reflexión Raúl 👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼 las mejores reflexiones nacen de la incertidumbre y de viajar solo, porque es cuando tienes más tiempo para pensar. Aunque viajar acompañado también se tiene tiempo para pensar, porque además de la compañía social, se.goza de la compañía pensativa inevitable o meditación en movimiento. Algo muy recomendable, necesario y que es escasea bastante últimamente.

    He viajado de todas las formas posibles, excursiones con colegas, viajes en pareja, viajes en soledad y viajar con perro. La primera la menos recomendable porque acaba siendo un domingueo constante jajaja pero también está bien, la más recomendable sin duda viajar con perro (o con gato por qué no jaja, ocupa y pesa menos aunque es más independiente). Ir con perro grande haces la mitad de km pero lo disfrutas el doble, estás protegido, la bici vigilará, tienes compañía y además tienes ese punto de soledad por ser de otra especie y otro lenguaje de comunicación jeje. Pero aprendes y desarrollas la complicidad con tu perro sin necesidad de apuntarlo a un curso de adoctrinamiento militar. La mejor educación es viajar.

    Un abrazo grande y si quieres puedes apoyarnos en nuestro reto solidario de este 2023 con mi grano de arena, saludos.

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